¿Quién verifica a los verificadores?
La distribución y el consumo de noticias en línea, el exceso de información y la …
La distribución y el consumo de noticias en línea, el exceso de información y la facilidad de manipular los contenidos explican la irrupción de las plataformas de verificación. Desde hace algunos años varias plataformas se han constituido sólo para luchar contra la desinformación que circula en internet, como por ejemplo Newtral y Maldito Bulo. También en el ámbito público ha habido iniciativas como la de la agencia de noticias EFE, EFE Verifica, o la de RTVE. Ahora bien, ¿quién verifica los verificadores? ¿Por qué damos credibilidad a este tipo de plataformas en contraposición a otros medios?
El año 2015, el Instituto Poynter creó la International Fact-Checking Network (IFCN) con el objetivo de impulsar el fact-checking y establecer una serie de criterios para evaluar el trabajo de los verificadores. A día de hoy, la IFCN reúne 98 miembros —entre los que se encuentra Verificat y otras plataformas como Le Monde (Francia), Full Fact (Reino Unido) y PolitiFact (EE.UU.). Aquí puedes consultar la lista completa de miembros.
Toda organización que aspire a formar parte de la IFCN debe aceptar y defender su Código de Principios. La propia IFCN se encarga de comprobar si los solicitantes tienen la capacidad de cumplir con estas normas deontológicas. El código está compuesto por cinco criterios:
– Compromiso con la neutralidad. Como señala el Instituto Poynter, “las organizaciones firmantes del acuerdo deben utilizar siempre el mismo criterio en sus desmentidos, sin postularse en ninguno de los temas de su verificación”.
– Compromiso de transparencia con las fuentes empleadas para verificar. “Los firmantes del acuerdo deberán dar a los lectores los detalles suficientes” acerca de la fuente empleada.
– Transparencia en cuanto a la propia organización y su constitución. Los miembros tienen que explicar claramente la estructura empresarial, sus vías de financiación, su estado legal y proporcionar vías de comunicación sencillas para los lectores.
– Transparencia en la metodología de trabajo. Los miembros del consorcio deberán detallar qué metodología utilizan para seleccionar, escribir, editar, publicar y corregir sus desmentidos. También deben alentar a los lectores a enviar quejas si consideran que no están haciendo su trabajo correctamente.
– Correcciones abiertas y honestas. Además de detallar claramente cuál es la política de desmentidos, las organizaciones firmantes del acuerdo deben de estar abiertas a corrección.
Cumplir con estos criterios atorga a las plataformas de verificación unos estándares de calidad y credibilidad de cara a la sociedad.