¿Qué sabemos de la campaña contra la pederastia del Ayuntamiento de Almería y por qué se relaciona con unas declaraciones antiguas de Irene Montero?
El consistorio ha pedido disculpas y ha reiterado el cartel, que incluía el logo del Pacto de Estado contra la Violencia de Género
El consistorio ha pedido disculpas y ha reiterado el cartel, que incluía el logo del Pacto de Estado contra la Violencia de Género
¿Qué se ha dicho?
Que la polémica campaña contra agresiones sexuales a niños y niñas que insinúa sexo consentido es del Ministerio de Igualdad y que la exministra Irene Montero también había defendido el consentimiento de los menores cuando lideraba esa cartera.
¿Qué sabemos?
Que la campaña «Si dice no, no es sexo, es agresión», no es del Ministerio de Igualdad, sino del Ayuntamiento de Almería, y que no tiene relación alguna con las declaraciones de Montero, que están sacadas de contexto y nunca defendió que las personas menores de edad puedan consentir.
Las redes sociales están llenas de fotografías de un cartel de una campaña contra las agresiones sexuales a menores de edad en el que aparece una imagen de un niño y una frase que dice: «Si dice no, no es sexo, es agresión», dando a entender erróneamente que los menores pueden consentir.
La falca está firmada con el logo del Ayuntamiento de Almería, el del Pacto de Estado contra la violencia de género y el del Ministerio de Igualdad. Varios mensajes virales que hacen referencia a dicha campaña aseguran que ha sido impulsada por el ministerio. Otros, han vuelto a viralizar unas declaraciones sobre el consentimiento infantil que ya fueron desmentidas en 2022 y en las que aparece la exministra de Igualdad y actual candidata a las elecciones europeas, Irene Montero. ¡Te lo explicamos»
La campaña contra la pederastia no es del Ministerio de Igualdad
La campaña es una iniciativa del Ayuntamiento de Almería que, según el contrato con el que se licitó, tenía por objetivo prevenir la violencia sexual. Un día después de su lanzamiento, el Ministerio de Igualdad ha retirado los fondos al consistorio de Almería porque considera que «no se encuadra, de ningún modo, con los ejes y medidas propuestas».
El Pacto de Estado contra la Violencia de Género ofrece a los ayuntamientos financiación para invertir en campañas, actividades, cursos y medidas para terminar con la violencia contra las mujeres. El mismo Ayuntamiento se ha disculpado y ha anunciado que el cartel se ha retirado justificando que no «había pasado los controles previos».
La edad de consentimiento
La ley establece que la edad legal de consentimiento sexual en España es de 16 años. Antes, ningún consentimiento es válido. Además, con la Ley de garantía integral de la libertad sexual, más conocida como ley del «Sólo sí es sí», el discursos del «sólo no es no» quedó obsoleto al entender que cuando hay una agresión sexual, la clave no está en si la víctima dice o no «no» y niega el consentimiento, sino en si hay un consentimiento explícito, un «sí». En ausencia de este, nada puede ser interpretado como un «sí» y, por tanto, no decir la palabra «no», no significa estar consintiendo. Solamente un consentimiento explícito es un consentimiento.
Irene Montero nunca defendió las relaciones sexuales consentidas con menores
El cartel de la campaña se ha relacionado con un vídeo de 2022 en el que la entonces ministra de Igualdad y actual candidata a las elecciones europeas por Podemos, Irene Montero, parece que diga que es posible que los menores tengan relaciones sexuales consentidas.
El vídeo fue verificado por aquel entonces por Maldita y Newtral, miembros como Verificat de la International Fact-Checking Network (IFCN) y la European Fact-Checking Standards Network (EFCSN), ya que se trata de unas declaraciones sacadas de contexto en una Comisión de Igualdad en el Congreso de los Diputados.
Montero respondía a una diputada de Vox, Lourdes Méndez, que opinaba sobre la ley del aborto y la ley trans y el impacto, para ella negativo, que estas normativas tendrían sobre la infancia. Montero respondía criticando a Vox por estar «en contra de los derechos sexuales y reproductivos», como de la «educación sexual», y explicaba que era un derecho de los niños y niñas conocer y saber cómo funciona su cuerpo, además de decidir sobre el mismo.