¿Qué relación existe entre el FOMO y la desinformación?
No queremos ser los últimos en enterarnos de las noticias y por eso a veces las compartimos automáticamente
Si eres millenial, seguramente conoces sobre el término “FOMO”. Este, acrónimo en inglés de fear of missing out, se refiere a una sensación de estar perdiéndose algo. La preocupación o malestar aparece provocado por acontecimientos que percibes como emocionantes a los que no estás presente, pero de los que ves imágenes por redes sociales.
El FOMO es un sentimiento común entre los jóvenes que ha incrementado con el auge de las redes sociales y la comparación constante online. La Universidad de King, en Estados Unidos, apuntaba que entre los usuarios que experimentan FOMO aparece una sensación común: el sentimiento de exclusión social.
Nadie quiere ser "el desubicado"
Actualmente vivimos en la era de la inmediatez: lo queremos todo, y lo queremos ya. Esto nos lleva muchas veces a tomar decisiones apresuradas, a comprar cosas que no necesitamos o a realizar actividades que tengan una recompensa instantánea, frente a aquellas que tardan más en dar fruto.
Pero las cosas bien hechas requieren de un tiempo que en muchas ocasiones no queremos invertir. Cocinar una receta, coser una prenda, escribir un artículo o leerse un libro son actividades muy placenteras, pero que no nos dan una recompensa al momento, sino que debemos esperar a terminarlas. Esto se aplica a condición de que hablemos de recompensa, por supuesto, porque también podemos disfrutar del proceso.
Esta inmediatez, junto al FOMO, crean el cóctel perfecto para la desinformación. ¿Que veo algo noticiable? La comparto, sin pasarlo por ningún filtro. ¿Alguien de mi entorno me pasa un artículo sensacionalista sobre el inminente fin del mundo? Retweet y compartir por los 10 grupos que tengo en WhatsApp. Nadie quiere ser la única persona de su círculo que no sepa las últimas novedades y sufrir esa “exclusión social” que hemos mencionado.
Ante todo, una respiración profunda
Por lo general, las cosas no son tan urgentes y nadie toma daño si no se entera de la información lo antes posible. Por eso, nosotros queremos incitarte a “ir en contra” de la sociedad y que, cuando recibas una información sospechosa, te tomes tu tiempo para respirar y pensar si aquello podría ser cierto, o si te da mala espina.
“Respira, espera, aixeca't sense pressa”, decía una canción de Andreu Rifé (conocida por su aparición en la famosa serie catalana Polseres vermelles). Y esta es también nuestra recomendación antes de compartir contenido en las redes sociales.