No está demostrado que 9 de cada 10 españoles tengan déficit de vitamina D, como asegura un anuncio de Actimel
Verificamos una campaña publicitaria de Actimel que afirma que 9 de cada 10 españoles tienen déficit de vitamina D.
¿Qué se ha dicho?
Que 9 de cada 10 españoles tienen déficit de vitamina D.
¿Qué sabemos?
Que el estudio que se cita como fuente en la publicidad de Actimel no dice esto, sino que habla de la ingesta de vitamina D, haciendo referencia a que ésta es inferior a la recomendada, lo que no resulta necesariamente en un déficit de vitamina D. Además, algunos estudios han hablado de déficit de vitamina D en un 40% de la población, pero se trata de un dato en constante debate.
Una campaña de Actimel afirma que 9 de cada 10 personas tienen déficit de vitamina D. Es ENGAÑOSO. La marca basa su campaña en un estudio que no analiza los niveles de vitamina D en sangre, sino la ingesta del micronutriente a través de la dieta. El estudio, basado en encuestas a la población, halló que el 94% de la población reportaba ingestas menores a las recomendaciones diarias, pero no habla de los niveles de vitamina D en sangre, ni tiene en cuenta que la principal fuente de vitamina D para la mayoría de personas es la exposición al Sol.
9 de cada 10 españoles tienen déficit de vitamina D
Danone ha lanzado una campaña publicitaria del producto Actimel en la que afirma que "9 de cada 10 españoles tienen déficit de vitamina D". Estos anuncios, presentes en lugares como el metro de Barcelona o cuñas de radio, han generado cierto revuelo por la contundencia del dato. El anuncio del metro consta de dos paneles, uno con el supuesto dato y la fuente de donde sale, y el otro con la marca y características del producto. Aunque no hay nada que les vincule más allá de la similitud en los grafismos y el estilo, en la cuña de radio sí aparece el dato y vinculado a la marca. Verificat se ha puesto en contacto con la empresa, pero en el momento de publicar esta verificación no ha recibido respuesta sobre las conclusiones de los estudios citados.
La web de Actimel, que promueve el producto como fuente de vitamina D, facilita información genérica sobre el micronutriente y cita dos referencias científicas como fuente: los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos y la Universidad de Oregon. La primera referencia asegura que una de cada cuatro personas en Estados Unidos tiene niveles demasiado bajos de vitamina D, y la segunda cita un estudio en 150 personas de Minnesota que sufrían dolores músculo-esqueléticos donde el 93% resultaron con esta carencia. Ninguno de los resultados habla del porcentaje de personas con déficit de vitamina D en España.
La cantidad ingerida no es la misma que la disponible en sangre
El anuncio impreso, donde se asegura que 9 de cada 10 españoles sufren déficit de vitamina D, sí incluye una referencia a un informe español que da datos: el estudio científico ANIBES número 14, que trata sobre ingesta diaria, adecuación de la ingesta y fuentes alimentarias de calcio, fósforo, magnesio y vitamina D en la población española. El informe concluye que “los resultados indican que existe un porcentaje importante dentro de la población (…) [las 543 personas que han participado y completado el estudio] que no alcanza las recomendaciones actuales de ingesta de (.. .) vitamina D”. Es decir, que el 94% de los encuestados reportó ingestas menores al 80% de las recomendaciones diarias a nivel nacional. El estudio habla de la ingesta, pero en ningún caso hace referencia a los niveles de vitamina D en sangre, que no sólo dependen de la dieta, y que es el dato que debería mirarse para analizar el déficit de vitamina D.
Javier Aranceta-Bartrina, presidente del Comité Científico de la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC) y miembro del grupo investigador ANIBES, explica a Verificat que “desde el punto de vista técnico, el estudio ANIBES (…) plantea un riesgo de ingesta inadecuada, que el aporte de vitamina D con los alimentos no llega a cubrir las necesidades que plantea la ciencia (…). Entonces, no se puede afirmar que exista una carencia, lo que existe es un riesgo de ingesta inadecuada de (…) vitamina D”.
Aranceta-Bartrina también refiere que “desde el punto de vista científico, es verdad que hay un porcentaje muy importante de población (…) [con] niveles de vitamina D mejorables”, pero recalca que “no todo el mundo tiene las mismas necesidades de vitamina D (…). Los valores que plantea la ciencia son valores que cubren (…) las necesidades del 90% [de la población], pero hay gente que necesita menos”. Por eso, menciona, se habla del riesgo de ingesta inadecuada.
La vitamina D también se absorbe por el Sol
La ingesta de alimentos no es la única fuente de vitamina D. De hecho, como indica la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV) en una publicación en su página web, la vitamina D también se sintetiza con la radiación solar. En este sentido, factores como la calidad del aire, el peso y la edad de cada uno, el lugar de residencia, el color de la piel y la época del año, juegan un papel importante, tal y como explicamos.
El déficit de vitamina D puede tener relación con diversas enfermedades (cardiovasculares, autoinmunes e incluso con la esclerosis múltiple, entre otros), como han señalado varios estudios, si bien todavía no se ha establecido relación causal alguna, según señala el manual Vitamina D, un libro que recoge el conocimiento científico más actual respecto al micronutriente.
Los datos apuntan a que al menos un 40% de la población española tiene niveles de […] [vitamina D] por debajo de los 20 ng/ml, un porcentaje que aumenta exponencialmente con la edad. Sin embargo, esta cifra está en debate constante, ya que es difícil establecer el límite entre normalidad y deficiencia. De hecho, Ramon Grimalt indica a Verificat que “se considera que hay déficit de vitamina D en un porcentaje muy alto de la población”, porque ni siquiera el clima soleado del Mediterráneo asegura los niveles mínimos de vitamina D.