Ni llevar ropa clara ni beber cerveza te calmará el calor: mitos a combatir durante el verano
Cataluña ha vivido en los últimos días el episodio de calor más extenso desde principios …
Cataluña ha vivido en los últimos días el episodio de calor más extenso desde principios …
Cataluña ha vivido en los últimos días el episodio de calor más extenso desde principios de año. La temperatura ha superado los 40 grados cuatro días consecutivos (del lunes 29 de julio al jueves 1 de agosto, ambos inclusive), según datos del Servicio Meteorológico de Cataluña (SMC).
La situación ha hecho resurgir a los mitos que cada verano intentan dar el mejor remedio para afrontar los calores de los días en que los termómetros se disparan. Estas ideas se transmiten a menudo de generación en generación o se difunden a través de las redes sociales. Algunos se repiten más que otros durante cada temporada, pero ¿cuáles están basados en la evidencia científica? Analizamos algunos de los más repetidos.
FALSO | Beber una cerveza fría ayuda a refrescarnos
El primer trago de una cerveza bien fría es un clásico de un tórrido día de playa. Pero, más allá de la satisfacción que genera a muchos, ¿ayuda a disminuir la sensación de calor? Lo cierto es que no sólo no nos aporta ningún beneficio, sino que puede ser contraproducente (más allá de que todas las bebidas alcohólicas tienen riesgos para la salud).
En primer lugar, la cerveza contiene alcohol, que inhibe la producción de la hormona antidiurética (ADH, por sus siglas en inglés), la encargada de evitarnos la diuresis. Es decir, cuando bebemos cualquier bebida alcohólica, por ejemplo una cerveza, tenemos más ganas de hacer pis debido a la inhibición de esta hormona. El sistema renal reabsorbe menos agua, fomentando la deshidratación, esto provoca la sensación de tener sequedad de boca y mucha sed
Por otra parte, ninguna bebida fría (sea cual sea) nos refrescará, todo lo contrario. El cuerpo debe estar alrededor de los 37 °C, y si se toma una bebida muy fría que nos baje la temperatura corporal de repente, nuestro organismo deberá ponerse en funcionamiento para volver a la temperatura “normal” (esta capacidad que tenemos se llama termorregulación). Todo ello implica un mayor gasto energético y un aumento de la sensación de calor. Justamente lo opuesto a lo que queremos conseguir.
TE LO EXPLICAMOS | Es mejor utilizar ropa clara porque absorbe menos el calor
Los tejidos oscuros absorben más la radiación proveniente del sol (incluida la infrarroja, es decir, el calor), mientras que los más claros la reflejan más. Por eso es común pensar que la ropa blanca es más fresca en verano. Ahora bien, también hay que tener en cuenta que nuestro propio cuerpo también emite calor y que, al igual que con la proveniente del sol, un tejido oscuro le absorberá mejor que uno claro. Es decir, una ropa negra, ayuda a disipar mejor el calor que emite nuestro propio cuerpo, mientras que absorbe el del ambiente; mientras que una blanca disipa la del ambiente, pero no la de nuestro cuerpo.
Por eso, la revista Nature publicó en 1980 un estudio concluyente que el calor es el mismo, independientemente del color de la pieza. De hecho, lo que parece importar es que la ropa sea holgada, para que permita el paso del aire y pueda refrescarnos. El tipo de tejido es también importante: un material fresco y transpirable, como el lino, la seda o el algodón, suelen ser la mejor opción.
Cabe recordar que la ropa actúa como primera línea de defensa contra el calor y los rayos solares. De hecho, utilizar piezas que cubran la mayor parte de nuestro cuerpo nos ayuda a proteger mejor la piel de las radiaciones perjudiciales para la salud, tal y como explicamos.
VERDAD A MEDIAS | Los abanicos o ventiladores son una buena opción para refrescarse
Los ventiladores o abanicos de mano son efectivos para enfriarse en ambientes donde la temperatura no es extremadamente alta. Pero cuando la temperatura ambiental supera a la corporal (alrededor de los 37 °C), esta efectividad cae, aunque pueden seguir ayudando a mejorar la sensación de calor, como concluye este estudio.
Esto es especialmente cierto cuando estas temperaturas tan altas se juntan con una humedad elevada, ya que entonces los ventiladores ayudan a que el sudor se evapore más fácilmente gracias a la aportación de un nuevo flujo de aire. En cambio, en climas secos solamente se mueve el aire caliente, por lo que la sensación de calor no mejora tanto. Estos dos hechos se han demostrado en diferentes estudios clínicos como este y este.
FALSO | El picante aumenta la temperatura del cuerpo y empeora la sensación de calor.
Contrariamente a lo que se pueda pensar, la ingesta de comida picante, en realidad puede ayudar a enfriar el cuerpo. Los alimentos picantes contienen capsaicina, una sustancia que estimula a los receptores de calor y de dolor del cuerpo, provocando sudoración. Sin embargo, la temperatura de nuestro cuerpo no aumenta, o lo hace ligerísimamente. Es solo la sensación que tenemos, puesto que provoca también una vasodilatación (dilatación de los vasos sanguíneos y aumento del flujo de sangre).
Este es uno de los motivos por los que en países que son muy cálidos (como por ejemplo India, Tailandia, Malasia o Vietnam, entre otros) la comida suele contener muchos ingredientes picantes. Pero también existen otras, como las tradiciones culinarias y culturales, la conservación de los alimentos, razones socioeconómicas o los tipos de ingredientes disponibles, como se explica en un artículo de la revista Nature.
Un mecanismo similar también ocurre cuando se toman líquidos calientes. Este tipo de bebidas desencadenan una respuesta de sudoración, que ayuda a bajar la temperatura corporal a medida que el sudor se evapora de la piel. Esta respuesta puede compensar el aumento inicial de la temperatura corporal provocada por la bebida caliente.