La futura ley trans catalana prioriza el consentimiento parental para la atención sanitaria a menores trans, a diferencia de lo que dice Vox
¿Qué se ha dicho? Que los menores a partir de doce años pueden cambiarse de …
¿Qué se ha dicho?
Que los menores a partir de doce años pueden cambiarse de sexo aunque sus padres no lo aprueben, en cuyo caso se impondrá un mediador o tutor.
¿Qué sabemos?
Que el anteproyecto de ley catalana defiende que la decisión de acceder a atención sanitaria para el proceso de transición en el caso de menores trans ha de ser compartida con sus representantes legales. La mediación se contempla como un último recurso y no como una imposición.
Joan Garriga, portavoz del Grupo Parlamentario Vox en Catalunya, aseguró en una rueda de prensa (minuto 4:46) que el anteproyecto de ley trans catalana contempla que “menores de a partir de doce años puedan cambiarse de sexo en contra de la voluntad o el acompañamiento de sus padres […] imponiendo un mediador o tutor”.
TE LO EXPLICAMOS. El artículo 18 del anteproyecto de la ley integral de reconocimiento del derecho a la identidad y expresión de género de Catalunya especifica las condiciones de acceso a la atención sanitaria de menores trans. “Como norma general”, en el caso de los menores de 16 años, “se ha de asegurar que la decisión final respete la opinión de la persona menor y que sea compartida con sus representantes legales”. En caso de que haya “discrepancia”, el anteproyecto contempla el acceso a “mediación”.
«[La ley catalana deja que] menores de a partir de doce años puedan cambiarse de sexo en contra de la voluntad o sin acompañamiento de sus padres […] imponiendo un mediador o un tutor»
Joan Garriga, Vox
Aunque la ley trans catalana todavía no está aprobada, el anteproyecto de ley desarrolla en su Título IV la atención sanitaria a las personas trans e intersexuales. Así, el artículo 17 contempla el cambio de nombre de la tarjeta sanitaria a pesar de no haberlo cambiado en el registro civil y en el DNI —algo que ya se hace—, al “acceso a la información y valoración de todos los tratamientos” y al “acompañamiento psicológico” y “tratamientos hormonales”, entre otros.
Respecto a esta asistencia sanitaria a personas menores de edad, el apartado 1D del artículo 18 expone que “como norma general, y especialmente en el caso de mayores de 12 años y hasta que hayan cumplido los 16, se ha de asegurar que la decisión final respete la opinión de la persona menor y que sea compartida con sus representantes legales”.
En caso de discrepancia, se puede acudir a mediación”. Así, la mediación se contempla como un último recurso y no como una “imposición” tal y como asegura Joan Garriga en la rueda de prensa.
Igualmente, en el apartado 1C del mismo artículo concretan que “para menores de edad iguales o superiores a los 16 años, solo será necesario su consentimiento”. Por tanto, se especifica que la autodeterminación solo es completa a partir de los 16 años, no antes, cuando los representantes legales continúan teniendo influencia en la decisión.
La ley prevé acompañar las personas trans en el ámbito sanitario
No obstante, que los menores de edad puedan acceder a tratamientos hormonales no es una novedad de esta futura ley ni tampoco de la ley trans española. Antes de la aprobación de esta última, una sentencia del 2019 del Tribunal Constitucional ya abrió la posibilidad de que los menores pudieran cambiar su sexo en el DNI, siempre que siguieran los requisitos de hormonación e informes médicos que establecía la antigua ley trans estatal, que en este caso eran obligatorios, como explicó Newtral, miembro de la red internacional de verificadores que luchan contra la desinformación (IFCN).
La diferencia entre el proyecto de ley trans de Catalunya y la ley española que ya está en vigor desde marzo de 2023 es que la segunda es más global y acompaña a las personas trans en el cambio de género en el ámbito administrativo, mientras que la catalana lo hace en el ámbito sanitario y educativo, que es en el marco en el que tiene competencias la Generalitat, según detalló el director general de políticas LGTBI de la Generalitat, Xavi Florensa, en una entrevista en Ràdio 4 (minuto 3:11).
La decisión ha de tomarse de forma correctamente informada
“La ley olvida que la medicación para cambiar de género tiene consecuencias irreversibles”, afirma también el grupo parlamentario de Vox a través de una imagen en su cuenta de X (antes Twitter). Sin embargo, el anteproyecto de ley trans insiste reiteradamente en la necesidad de que las personas trans y sus representantes legales en caso de ser menores, reciban “información adaptada a su edad, madurez y comprensión para poder tomar una decisión libre e informada”.
Esta información incluye la “valoración de todos los tratamientos que afectan a las personas trans”. Por tanto, el anteproyecto de ley defiende y garantiza este acceso a la información al afirmar en el apartado 2C del artículo 17 que cualquier “intervención o procedimiento sanitario” requiere ser aceptado de forma “libre y voluntariamente”, después de haber sido informado.