No se está fumigando Barcelona y las estelas de los aviones no tienen nada que ver con la propagación de la variante delta del coronavirus

La aparición de las estelas y su duración en el cielo dependen, fundamentalmente, de las condicioines atmosféricas


Nos habéis enviado un audio que dice que en Barcelona se están realizando muchos chemtrails, supuestamente, fumigaciones con sustancias químicas que desprenden los aviones, y que esto coincide con la expansión de la variante delta del SARS-CoV-2. En este sentido, también hemos recibido una fotografía que dice haberse hecho a finales de junio en Pallejà, a 20 km al norte de Barcelona, donde se pueden ver muchas estelas de aviones en el cielo, y nos preguntabais por qué pasa esto. Las estelas que dejan los aviones dependen, principalmente, de las condiciones atmosféricas y no tienen ninguna relación con la pandemia. Además, los aviones que fumigan (por ejemplo, en agricultura) no vuelan tan alto.

"Están haciendo muchos chemtrails (chem, es chemical, de químico, trails). Esto es lo que echan desde los aviones. […] Han estado fumigando esta semana en Barcelona y anuncian la ola delta en Barcelona"

Los especulaciones sobre las estelas que dejan los aviones vienen de lejos, pero detrás de estas marcas que vemos en el cielo hay una explicación física y un amplio consenso dentro de la comunidad científica respecto a que no son fumigaciones, sino partículas de agua en forma de cristales de hielo, que se ven más o menos en función de las condiciones atmosféricas. Según un estudio de la Universidad de California del año 2016, 76 expertos en química atmosférica y geoquímica concluyeron que no hay ninguna evidencia sobre la existencia de un programa atmosférico secreto a gran escala.

Por lo tanto, también es falso que estos rastros que dejan los aviones guarden relación con los contagios por covid-19. La incidencia acumulada por 100.000 habitantes a día 21 de julio en el área metropolitana de Barcelona es de 1.068 casos. Según los estudios realizados hasta día de hoy y la experiencia de la evolución epidemiológica de otros países como Reino Unido y la India, la variante Delta del virus se contagia con más facilidad y, por lo tanto, la propagación del virus es más elevada. Además, está demostrado que la mayoría de contagios se producen en espacios interiores, mientras que es mucho más difícil contagiarse en espacios al aire libre como, por ejemplo, andando por la calle.

Qué son las estelas de condensación de los aviones

Los rastros que dejan los aviones cuando vuelan se denominan estelas de condensación o contrails, en inglés. Según explica a Verificat el meteorólogo Néstor Gómez, que trabaja en TV3, este efecto se produce por la diferencia de temperatura entre las partículas que desprenden los aviones y la temperatura exterior a la altura a la cual están volando. Las estelas de condensación se empiezan a formar a partir de los 10 kilómetros de altura, que coincide con la altura de vuelo de los aviones, y a una temperatura de entre 30 y 40 grados bajo cero. En este sentido, los aviones, cuando están en funcionamiento, emiten queroseno y vapor de agua a unas temperaturas mucho más elevadas que la temperatura atmosférica, y por la condensación se crean “unos cristales de hielo” que desde la tierra se ven como estelas.

Recientemente, la Organización Meteorológica Mundial ha establecido que si estas estelas de condensación se quedan más de 10 minutos sin deshacerse se denominan cirrus homogenitus, es decir, un tipo de nube creada por humanos. Las estelas de condensación, por lo tanto, no son perjudiciales para la salud, las que sí tienen un impacto negativo sobre el planeta y la salud son otras partículas que emiten los aeronaves. “Las estelas de condensación son simples nubes de hielo que no pueden envenenarte” pero “las emisiones de los aviones son en sí una fuente de gases de efecto invernadero y de partículas contaminantes que no se pueden ni mucho menos despreciar”, según el mismo informe de la Agencia Estatal de Meteorología.

La contaminación que generan los aviones y que es perjudicial para el planeta viene de otras partículas que desprenden los motores de aviación. Según la Agencia Estatal de Meteorología, las aeronaves "emiten vapor de agua, dióxido de carbono (CO₂), pequeñas cantidades de óxidos de nitrógeno (NOx), hidrocarburos, monóxido de carbono, gases de azufre y partículas de hollín y metal”. El dióxido de carbono y el óxido de nitrógeno generados por la actividad humana han hecho aumentar en los últimos dos siglos la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera, los que generan el calentamiento global y el cambio climático, según un artículo publicado en el Journal of Scientific Research & Reports, pero no influye en la creación de las estelas de condensación, como explica el mismo informe de la AEMET.

A mayor calor, más tardan en marchar las estelas de condensación

La duración y longitud de estos rastros que vemos en el cielo varía en función del viento y de las condiciones atmosféricas que hay en aquellas cotas, según explica el meteorólogo Gómez. Por ejemplo, a partir de los 5.000 metros de altura podemos encontrar vientos superiores en los 150 km/hora, que se denominan corrientes en jet y que, si son fuertes, difuminan la estela de condensación más rápidamente que si las corrientes son suaves.

Los condiciones atmosféricas también son importantes. Si en el momento en que pasa un avión la atmósfera está seca no habrá estela de condensación; en cambio, si la atmósfera está húmeda, sí se formará. Otro condicionante que favorece la formación de estelas es la dirección del viento. Con vientos del sur o más cálidos es mucho más probable ver los contrails, mientras que, cuando hay vientos que llegan del norte y que son más fríos estas marcas aparecen menos. Una técnica para saber cuando es más probable ver estelas de condensación es fijarse en el cielo: cuando este es completamente azul, las estrellas se verán con menor frecuencia, mientras que si está blanquecino es más probable verlas. Por lo tanto, cuando la atmósfera está húmeda y se ha creado una estela de condensación larga y, además, y hay poco viento o es muy débil, esta durará más, hasta 24 horas.

El calentamiento global hace que sea más frecuente ver las estelas

Según ha explicado Néstor Gómez es verdad que cada vez podemos observar más estelas, pero por el efecto humano: “Estamos haciendo que la atmósfera tenga cada vez más humedad, y esto permite que los efectos de las estelas duren más”. Además, el número de vuelos de avión también ha aumentado mucho en los últimos 10 años. Desde el año 2010 hasta el 2019 ha habido un incremento de un 72% de vuelos al aeropuerto de Barcelona-El Prat, contando los aviones de pasajeros, los de operaciones y los de mercancías. Si miramos la diferencia entre junio del 2020, marcado por los restricciones de la covid-19, y el junio del 2021, los vuelos han aumentado un 78%, pero todavía no han recuperado la frecuencia con la que circulaban antes de la pandemia.

En este sentido, Gómez da tres razones por las cuales la teoría de la fumigación no es creíble. En primer lugar, si se lanza un objeto a 10.000 metros de altura, este no caerá verticalmente por la presencia de los fuertes vientos que hay a estas altitudes. Esto se vio con la erupción de los volcanes de Islandia, cuando se creó una nube de 10 km de altura que se esparció por toda Europa. En segundo lugar, si se lanzaran virus es muy poco probable que estos soportaran una presión atmosférica tan baja. En tercer lugar, y como ejemplo, las fumigaciones que se hacen en el mundo agrícola para evitar plagas en los campos se realizan con avionetas que vuelen a 10 metros de altura aproximadamente, porque si se lanzaran a 10 km no serían efectivas.

En cuanto al caso concreto de Pallejà, Verificat se ha puesto en contacto con el ayuntamiento del municipio y con la policía local y nos han confirmado que no tienen constancia de que pasen más aviones de los habituales por encima del municipio. Tampoco hay ningún aeródromo cerca de la zona y por la proximidad con el aeropuerto del Prat es probable que los aviones que lleguen o marchen de Barcelona sobrevuelen este área. En la página oficial del aeropuerto, mediante el uso de “WebTrak”, se puede visualizar la actividad de las aeronaves que se elevan y aterrizan en el aeropuerto de Barcelona en tiempo real y en el último mes. Otra web que ofrece información sobre los vuelos que se están realizando en directo en todo el mundo es Plane Finder, que también cuenta con la opción de mirar las rutas de los últimos 14 días. En ambos casos, se pueden divisar vuelos frecuentes sobrevolando los alrededores de la localidad.