El independentismo no ha «importado» inmigración ilegal, como afirma VOX
El candidato de VOX a la presidencia de la Generalitat, Ignacio Garriga, acusa a los partidos independentistas de fomentar las llegadas, pero la Generalitat no tiene las competencias
El candidato de VOX a la presidencia de la Generalitat, Ignacio Garriga, en una entrevista en el programa Café d'idees de TVE Catalunya, ha acusado a los partidos independentistas de fomentar la inmigración ilegal “para convertirlos en los nuevos catalanes”. Es FALSO. En Catalunya la población extranjera ha aumentado en 60.000 personas en los últimos 10 años, el Govern de la Generalitat no tiene competencias para modificar la ley de extranjería y los inmigrantes que acaban de llegar no tienen derecho a voto.
"El separatismo ha importado esta inmigración ilegal para convertirlos en los nuevos catalanes"
☕️ @Igarrigavaz @vox_barcelona creu que la immigració il·legal ha convertit barris segurs com el Raval i Salt en guetos de delinqüència.
🗣️ "El separatisme ha importat aquesta immigració per convertir-los en els nous catalans"#GemmaNiergaRTVE @RTVECatalunya @radio4_rne pic.twitter.com/OUoxPwrSi5
— Cafè d'idees (@cafedidees_rtve) December 21, 2020
Los partidos independentistas gobiernan en Catalunya desde 2012, cuando Artur Mas y Oriol Junqueras firmaron el pacto de gobernabilidad y la consulta sobre la autodeterminación. La evolución de la presencia de población extranjera en Catalunya en el periodo 2005-2018 demuestra que, después de unos años de crecimiento, el porcentaje de extranjeros se estabilizó coincidiendo con el estallido de la crisis económica del 2008. En los años posteriores, marcados por la recesión, empezó a bajar y no es hasta 2016 que, coincidiendo con la mejora de la economía, volvió a incrementarse la población extranjera.
En los últimos diez años, la población extranjera empadronada en Catalunya ha pasado de 1.198.538 a 1.259.013, cosa que supone un aumento, en una década, de 60.475, según los datos del Idescat. Es decir, un 5%.
De hecho, en los peores años de la crisis, el saldo migratorio en Catalunya llegó a ser negativo.
En segundo lugar, el “separatismo” catalán no tiene competencias sobre la inmigración irregular, puesto que quien se encarga del “control de entrada y salida del territorio nacional de españoles y extranjeros; la prevención, persecución e investigación de las redes de inmigración ilegal, y en general, el régimen policial de extranjería, refugio y asilo e inmigración” es la Comisaría General de Extranjería y Fronteras, que depende del Ministerio del Interior. También depende del gobierno español la regularización de trabajadores inmigrantes.
El Estatuto de Autonomía de Catalunya de 2006 incorpora, como competencias de la Generalitat, la acogida y la integración de las personas extranjeras inmigradas. De aquí se deriva la Ley de acogida de las personas inmigradas y las retornadas en Catalunya. Esta legislatura, el Gobierno ha contado con una Secretaría de Igualdad, Migraciones y Ciudadanía que depende del Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias. En cualquier caso, la Generalitat no tiene margen competencial para “importar inmigración ilegal”, como afirma VOX, sino para dar atención a las personas que ya se encuentran en territorio catalán.
Finalmente, afirmar que los partidos independentistas tienen interés en incrementar la proporción de personas extranjeras en su electorado no tiene sentido desde el punto de vista electoral. Los extranjeros con permiso de residencia tienen derecho a votar solo en las elecciones muncipales (si son europeos o de algún país con convenio). En las elecciones autonómicas o en las generales solo tienen derecho a voto las personas con nacionalidad española, un proceso que generalmente comporta llevar más de 10 años de residencia.