Los índices de pobreza en España no están mucho peor que hace seis años, como asegura Feijóo

El presidente del Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, afirmó en una entrevista publicada en el diario La Vanguardia el pasado domingo 29 de septiembre que los índices de pobreza están “mucho peor” que hace seis años. Asimismo, el dirigente popular publicó en su cuenta de X (antes Twitter) el 1 de octubre que “la pobreza crece”.

Es ENGAÑOSO. El riesgo de pobreza relativa pasó del 27,3% en 2018 al 26,5% en 2023, según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Es decir, se ha mantenido prácticamente estable y no ha aumentado “mucho”. No obstante, la diferencia porcentual es muy pequeña, por lo que tampoco puede afirmarse que sean estadísticamente significativas, tal y como afirman los expertos consultados por Verificat.

«Pero […] los índices de pobreza están en una situación mucho peor que hace seis años»

Alberto Núñez Feijóo, Presidente del Partido Popular

El riesgo de pobreza o exclusión social en España suele medirse a través de la tasa AROPE, que cuantifica la población que presenta al menos una de las siguientes características: riesgo de pobreza, carencia material y social severa o baja intensidad en el empleo, según define  el INE (página 105). No obstante, las tres categorías también se miden de forma independiente como indicadores de pobreza. Desde Verificat hemos preguntado al PP acerca de la medida que han utilizado para afirmar que ha habido un empeoramiento de la situación de pobreza, pero en la fecha de publicación de esta verificación no hemos obtenido respuesta.

El indicador de riesgo de pobreza relativa albergaba hace seis años al 27,3% de la población española, mientras que ahora hay un 26,5%. Están en riesgo de pobreza relativa aquellas unidades de consumo (hogares, personas) que tienen unos ingresos por debajo del umbral de pobreza, que se sitúa en el 60% de la mediana de los ingresos por unidad de consumo ese año, según explica el INE. 

Por otra parte, la tasa AROPE ha pasado de representar a un 27,3% de la población en 2018 a un 26,5% de la población en 2023. En ambos casos son oscilaciones muy pequeñas y que, por tanto, no tienen relevancia estadística, tal y como han afirmado expertos a Verificat.

El indicador de baja intensidad en el empleo ha pasado de incluir el 18,8% de la población al 8,4%. Este hace referencia a aquellos hogares cuyos miembros trabajaron “menos del 20% del total de su potencial de trabajo”, según explica el INE a través de la metodología (página 106) de la Encuesta de Condiciones de Vida (ECV), donde se recogen estos datos.

En cuanto a la carencia social y material severa, es el único de los tres indicadores que ha empeorado en relación al 2018, pasando de un 8,7% a un 9% de la población. En este caso, mide diversos componentes, tanto a nivel de hogar como persona. Según explica el INE a través también de la metodología (página 105) de la ECV, se considera que una persona está en situación de carencia social y material severa cuando cumple siete de las trece limitaciones de la lista, entre las que se encuentran: no poder permitirse unas vacaciones al año, disponer de conexión a internet, reunirse con amigos o familiares para tomar algo una vez al mes o disponer de automóvil, entre otros.