No eres especial: las afirmaciones del horóscopo se aplican a todo el mundo
En psicología, existe un fenómeno conocido como “efecto Barnum” o “efecto Forer” que se refiere …
En psicología, existe un fenómeno conocido como “efecto Barnum” o “efecto Forer” que se refiere a la tendencia de las personas a aceptar afirmaciones vagas, ambiguas y generales como descriptivas de su personalidad única y especial.
Este efecto lleva años estudiándose para entender su funcionamiento, y parece que su origen se remonta al siglo pasado: en 1949, el psicólogo Bertram R. Forer publicó un artículo donde ya apuntaba que “las evaluaciones de la personalidad pueden ser (…) en términos tan generales que no tienen sentido (…), o pueden tener 'validez universal' y se aplican a todos”.
Unos años más tarde, Paul E. Meehl (1920-2003), profesor en el Centro de Filosofía de la Ciencia de Minnesota sugirió adoptar el término 'efecto Barnum' para denominar aquellos procedimientos clínicos (…) en los que las descripciones de personalidad obtenidas a partir de tests se diseñan para encajar con el paciente”, usando afirmaciones o negaciones tan generales que encajarían con cualquiera.
Nos dejamos engañar, pero con estilo
“La gente tiende a aceptar afirmaciones sobre sí mismas en proporción a su deseo de que estas sean verdaderas, y no en proporción a la precisión (…) de las afirmaciones”, explicaba un artículo de 2018, que analizaba las consecuencias de este efecto sobre nosotros. “Tendemos a aceptar afirmaciones cuestionables, incluso falsas, sobre nosotros mismos, si las consideramos suficientemente positivas o halagadoras”.
Además, el efecto Barnum funciona mejor para declaraciones positivas. Según la enciclopedia Britannica, “es mucho menos probable que la gente crea que una afirmación se aplica a ellos si es una afirmación negativa, como 'A menudo pienso hacer daño a las personas que hacen cosas que no me gustan'”. Por eso, quien quiera hacer uso del efecto Barnum utilizará principalmente frases positivas, o frases que podrían parecer negativas, pero se compensan con algo positivo. Algunos ejemplos:
- A veces te esfuerzas demasiado en proyectos que no funcionan.
- Piensas de forma independiente y te enorgulleces de hacer las cosas de forma diferente a los demás.
- A veces puedes hablar fuerte, ser extrovertido y una persona sociable, pero otras veces puedes ser tranquilo, tímido y reservado.
- A veces eres demasiado duro contigo mismo y muy crítico.
- Aunque tienes algunas debilidades, te esfuerzas mucho por superarlas y ser mejor persona.
¿Quién nunca se ha sentido identificado con una afirmación de este tipo?
Aplicaciones del efecto Barnum
Varias corrientes pseudocientíficas utilizan este efecto a la hora de, por ejemplo, hacer predicciones sobre el futuro, o de describir la personalidad de alguien. Es el caso de disciplinas como el tarot, la lectura de la mano, el horóscopo, las bolas de cristal, o la carta astral, entre otros. En la práctica de estas se emiten afirmaciones generales que podrían encajar con cualquier persona.
En 2022 se publicó un artículo que demostraba justamente la poca fiabilidad del horóscopo. En el estudio que describe, 12 participantes fueron reclutados aleatoriamente en un centro comercial de China. Se les leyó 12 descripciones del zodiaco sin decir el signo al que supuestamente correspondían y después se les pidió que eligieran la que más se adecuaba a su personalidad. Los participantes o bien escogieron más de una definición, o bien se mostraron indecisos ante la elección, confirmando como esta disciplina aplica el efecto Barnum: las descripciones del zodiaco son vagas y generales y podrían encajar con todo el mundo. Es cierto que la muestra era muy pequeña, y, por tanto, probablemente no sea significativa, pero el resultado es orientativo de lo que podría ocurrir en caso de repetirlo con una muestra mayor.
Por suerte, de momento el horóscopo "se trata de una doctrina inofensiva", como indicaba un reportaje del Ara. Pero estas disciplinas no se basan en evidencias demostradas, así que, de las pseudociencias, mejor que nos mantengamos bien lejos.